La Navidad siempre ha sido un período especial por muchas razones. Es tiempo de encuentro, concordia y solidaridad. Hablar de navidad es hablar de emociones.
Este año, por motivos de sobra conocidos por todos, estas fiestas plagadas de bombillas de colores deben venir marcadas más que nunca por la esperanza. Debe ser esa la luz más brillante de todas.
La situación de pandemia ha dejado una honda impronta en nuestra sociedad: ha tenido efectos económicos, sociales y, por supuesto, sanitarios. En este sentido, la navidad pasada vino condicionada por la distancia social, lo que provocó en muchos casos que los familiares y amigos no pudieran encontrarse, rompiendo todo ello con la esencia de estos momentos de unión y afecto. Afortunadamente, y gracias a la acción conjunta de sanitarios, investigadores, instituciones y de la población en general la de 2021 será una navidad recordada como el cierre de un paréntesis de distancia que ahora dejaremos atrás con abrazos y sonrisas.
El conocimiento que tenemos y que tengamos sobre la situación puede determinar nuestra realidad más inmediata, por eso debemos preservar el equilibrio entre nuestro disfrute y la responsabilidad para con la pandemia que aún no ha terminado. Sabemos que es este el sendero que debemos seguir para dejar atrás un mal sueño que, en parte, depende de nosotros no volver a tener.
Afrontamos el año próximo con la ilusión de seguir avanzando en esta y en otras luchas con paso firme y sin bajar la guardia. Nuestro país es un pueblo resiliente que ha sabido quedarse con las enseñanzas y fortalezas que esta crisis ha dejado y transformarlas en herramientas que con el tiempo harán de nosotros una sociedad más capaz, madura y consciente. La mezcla de optimismo y responsabilidad será una antorcha con la que abrirnos camino a través de un 2022 que vendrá marcado por la recuperación económica y de nuestra propia identidad como sociedad unida y solidaria.
Nuestros mejores deseos están con España pero también con Europa y con el mundo, pues más allá de divisiones administrativas y/o políticas lo que nuestra historia más inmediata nos ha enseñado es que unidos somos capaces de alcanzar logros memorables, y que formamos parte de un todo que necesita de todos. Y precisamente esto es lo que también trata de recordarnos la época más dulce del año.
Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo.
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